6 trucos para lograr una buttercream perfecta
¿Tu buttercream te salió muy líquida o demasiado firme? ¿Tus flores de buttercream no se sostienen y se derriten o tu preparación quedó llena de burbujas? ¡Estamos aquí para ayudarte!
Hacer tu propia buttercream desde cero es una excelente manera de agregar sabor y estilo personal a tus tortas y cupcakes, pero si tu manteca está demasiado blanda o si la temperatura ambiente del lugar donde estás trabajando es muy alta, es posible que tu preparación no salga como esperabas. Por suerte, con estos pequeños trucos y consejos te vas a olvidar de esos problemas.
Cómo espesar el glaseado de crema de manteca
Agregar sabor a tu buttercream es una manera fácil y segura de personalizarla a tu gusto, sin embargo, demasiado saborizante líquido podría hacer que tu preparación quede demasiado ligera y no se mantenga. Para espesar tu preparación agregá azúcar impalpable (también conocida como azúcar glass), de a una cucharada a la vez, integrándola completamente hasta que obtengas la consistencia deseada. Si querés agregar sabor a tu buttercream, probá con saborizantes concentrados como el Extracto de Vainilla transparente en lugar de jugo o purés, que pueden agregar demasiado líquido y diluir tu preparación.
También es posible que la manteca y la manteca vegetal estén demasiado calientes al empezar o que la cocina esté demasiado calurosa, lo que a menudo es la causa de la separación de los ingredientes. Para evitar que la buttercream se separe, verificá que el horno esté apagado al momento de empezar con la elaboración y que la habitación se haya refrescado. Si tu glaseado comienza a parecer soposo o muy líquido, dejá de mezclar y enfría el recipiente y el batidor durante unos 10 minutos hasta que la mezcla se solidifique un poco y luego volvé a batir. Si el calor es inevitable, probá una receta de buttercream con poca o casi sin manteca. ¡Suscribite a nuestro blog para no perderte las nuevas recetas que iremos subiendo!
Cómo recuperar buttercream granulado o cortado
Lo mejor de nuestra receta de buttercream es que no es propensa a cortarse debido a su bajo contenido de líquidos, sin embargo, si tu buttercream se ha cuajado o parece cortada o la textura parece fuera de lugar, lo más probable es que se deba a la temperatura en que fueron utilizados sus ingredientes.
Para lograr los mejores resultados, asegurate de que todos los ingredientes del glaseado estén a temperatura ambiente antes de combinarlos. Especialmente si usás manteca y manteca vegetal en tu receta. Si ambas grasas no están a la misma temperatura quedará una preparación muy líquida, en caso de que estén demasiado calientes; o no se integrarán uniformemente, si están demasiado frías. Esto hará que la preparación se vea granulada o cortada.
Si se agregan líquidos fríos a una mezcla a temperatura ambiente también puede crear un problema similar, así que asegurate de que la leche o crema esté a temperatura ambiente antes de agregarla.
Como regla general, la manteca a temperatura ambiente debe estar firme, pero debe poder hundirse fácilmente si presionás la superficie con el dedo. Si tu dedo se siente muy grasoso después de tocar la manteca, es señal de que está demasiado caliente. En cambio, la manteca vegetal puede estar más tiempo a temperatura ambiente. Seguramente estará sólida, pero cremosa, verificalo antes de usarla.
También puede suceder que la buttercream se corte cuando estamos re-batiendo una preparación que teníamos freezada. Si esto sucede, es probable que la buttercream esté demasiado fría. Dejala reposar unos minutos para que tome temperatura ambiente antes de volver a batir y obtendrás mejores resultados.
Otra de las causas de que la buttercream se pueda cortar es que hayas agregado demasiado líquido a tu receta. Para evitar esto, elegí usar sabores concentrados, como extractos, mermeladas o incluso ralladura de cítricos en lugar de jugo o puré.
Cómo lograr un glaseado más consistente para decorar con picos y uno más ligero para untar
Afortunadamente, cambiar la consistencia de la buttercream require soluciones bien sencillas.
En términos generales, al agregar más líquido diluiremos la consistencia de nuestra buttercream y si agregamos más azúcar impalpable (o azúcar glass) lograremos una preparación más espesa. Es importante tener en cuenta que al hacer esto también afectaremos el sabor del glaseado, así que siempre hay que ir probando la preparación a medida que mezclamos.
¿Por qué mi buttercream se cae y se derrama?
Si tenés la impresión de que tus decoraciones con buttercream se están cayendo, es muy probable que la temperatura de la habitación sea demasiado alta, lo que hace que la buttercream se derrita.
Desafortunadamente, es difícil controlar la temperatura ambiente en algunos climas, por lo que recomendamos usar una receta de buttercream resistente a alta humedad o una de buttercream extra blanca si estás preparando un pastel en un día caluroso o en un ambiente cálido. Ambas recetas contienen en mayor o menor medida manteca vegetal que tiene un punto de fusión mucho más alto que la manteca, lo que le da a tus decoraciones una mayor estabilidad. También podés agregar una cucharada de merengue en polvo para darle mayor fuerza.
¿Por qué no se seca la capa exterior de mi buttercream?
La formación de costras significa que la capa exterior de glaseado está seca al tacto, formando una “cáscara” suave. La formación de estas costras es especialmente importante cuando se realiza la primera capa de cobertura para fijado de migas antes de decorar una torta o se adorna con flores, bordes u otras decoraciones.
Si tu glaseado no forma una costra, podría deberse a que tiene un alto contenido de manteca. Usar una receta con manteca vegetal aumenta la probabilidad de formación de costras, al igual que agregar más azúcar impalpable, pero recordá que esto puede provocar que el glaseado sea demasiado dulce, así que no te olvides de ir probando la preparación sobre la marcha.
Si preferís no usar manteca vegetal o azúcar impalpable, podés agregar 1 cucharada de merengue en polvo a una receta de buttercream completa para aumentar su estabilidad.
¿Por qué mi buttercream tiene burbujas?
Las burbujas en tu preparación son causadas por incorporar demasiado aire durante el proceso de mezcla. La incorporación de aire hace que el glaseado sea ligero y esponjoso, pero agregar demasiado puede crear grandes bolsas de aire.
Para evitar estas burbujas, asegurate de estar usando el accesorio de paleta o lira en tu batidora de pie; o batidores para una batidora de mano. El accesorio para batir (batidor o globo) incorporará demasiado aire al glaseado. Es importante que te detengas y verifiques la consistencia del glaseado a medida que avanzás. Eso también evita que mezcles durante demasiado tiempo a altas velocidades.
En caso de que tu glaseado ya tenga burbujas de aire, dejalo reposar durante unos minutos. Esto permitirá que la crema de manteca se desinfle. Después de unos minutos, use la técnica de macaronage para eliminar el aire del glaseado (con una espátula, presioná el glaseado a un lado del tazón, raspá y repetí hasta que se vea suave).
Si estos trucos te fueron útiles, ¡contanos! ¡Y déjanos tus propios consejos para mejorar el glaseado de buttercream!
Claudina Fuentes
Hay receta de buttercream resistente al calor ?.